
¿Es recomendable mantener las barras de techo instaladas todo el año?
Muchos conductores que instalan barras de techo para llevar cofres, bicicletas o material de trabajo se preguntan si resulta práctico dejarlas montadas de manera permanente. La respuesta es clara: aunque no hay una norma que lo prohíba y técnicamente se pueden mantener puestas, hacerlo trae más inconvenientes que beneficios.
Mayor consumo de combustible
Las barras, incluso sin carga, generan resistencia al aire. Esto aumenta ligeramente el consumo de combustible en trayectos diarios, algo que a la larga se nota en el bolsillo. Si buscas eficiencia en cada kilómetro, conviene retirarlas cuando no las necesitas.
Desgaste de las barras y del vehículo
La exposición constante a la lluvia, al sol y a los cambios de temperatura acelera el desgaste de las barras y de sus anclajes. Con el tiempo pueden aparecer ruidos, holguras o incluso óxido, lo que reduce su vida útil. Además, mantenerlas siempre puestas puede deteriorar la pintura o las gomas del techo del vehículo.
Riesgo de ruidos molestos
Cuando circulas a ciertas velocidades, las barras generan silbidos o vibraciones que pueden resultar incómodas en viajes largos. Retirarlas cuando no se usan es la manera más sencilla de evitar ese problema.
Seguridad y mantenimiento
Quitar las barras cuando no se utilizan permite revisarlas con frecuencia, comprobar que los tornillos y gomas de fijación están en buen estado y evitar que se conviertan en un punto débil de seguridad. Un montaje limpio y bien conservado es la mejor garantía para cuando realmente las necesites.
Conclusión
Dejar las barras de techo instaladas todo el año es posible, pero no recomendable. Retirarlas cuando no tienen uso prolonga su vida útil, cuida la estética del vehículo, evita ruidos innecesarios y reduce el consumo de combustible. Si quieres sacarles el máximo partido, lo ideal es montarlas solo cuando vayas a utilizarlas.